A MIS PADRES



Es difícil escribir palabras a unos padres; uno lo que quiere, más que palabras, es poder tenerlos al lado, para hablarles y abrazarles y seguir diciéndoles que los quiero.

Desde jóvenes hemos conocido los valores de unos padres, qué,
desde la grandeza que da la sencillez y la humildad, nos han hecho que con los pies pegados al suelo, hayamos reclamado y amado algo:
orgullo de ser trabajadores y responsables.

Muchas veces pienso: Joder la que han liado Tibu y Casto.

Del amor, de las penurias, del trabajo, del desgaste, del sacrificio, de la resignación y del impulso para coger fuerzas, hemos salido tres hijos que ya están volando con otras 3 familias más.

Quien les iba a decir que hasta tierras lejanas, en las que en su día mi padre llegó y durmió en la puerta de la estación, marchamos dos hijos para pelear por una vida digna;
quien les iba a decir que ese chico con la cabeza más pequeña que sus orejas, y que trabajaba con mi padre en La Asturiana iba a ser el orgullo de yerno con el que pasean por el pueblo y el orgullo de
Marido, para una hija, que más que una hija, es una santa que ya la llevamos en el pedestal de nuestro corazón como ejemplo de fuerza y ganas de vivir.
Si hubieran mirado en estos 50 años de convivencia y hubieran visto que aquel mal estudiante y que se llevó
más de una colleja por ello, iba a ser uno de los más respetados mecánicos de la provincia de Almería
y que tuviera 3 soles de hijos y una mujer que lo espera, seguro que repetirían otros 50 años más.
Quien les iba a decir que aquel descuido en vacaciones gallegas,
con una madre con 42 años y llena de vitalidad, les
iba a llegar su penúltimo quebradero de cabeza, que con 18 años:
voló, se independizó, se fue a vivir con el amor de su vida y hoy dia
está casado por la santa madre iglesia y sigue enamorado de una catalana y de un hijo que le roba besos a la madre.

No se si conseguiré leerlo, lo que si les puedo decir aquello que les dice el cura cuando termina la misa: Pueden ir en paz, que pueden estar muy orgullos, de cómo lo han hecho como padres, y maestros.

Y una cosa que nunca olvidaremos: sencillez, esfuerzo, trabajo, sacrificio y valor por las cosas, son lo que representan mis padres en toda una vida como ejemplo.

Comentarios

Rafa ha dicho que…
ya sabia yo que tu tienes buena madera, ahora lo entiendo, con esos pedazos de padres no podia ser de otra manera.
mis felicitaciones a tus padres, que deben sentirse super orgullosos de los hijos que tienen.

salu2